5 signos de chantaje en los juegos “gratuitos”

¡Prepararos! Os voy a contar el descubrimiento más sorprendente relacionado con los juegos electrónicos que he hecho este año. Las apariencias engañan y los juegos gratuitos no son lo que parecen.

Juegos online

¡Prepararos! Os voy a contar el descubrimiento más sorprendente relacionado con los juegos electrónicos que he hecho este año. Los juegos gratuitos son más rentables que las consolas y los videojuegos juntos. No olvidéis que los ingresos proceden de los banners publicitarios que se muestran durante la experiencia de juego. El 77% de los beneficios de la App Store de Apple proceden del juego y el 92% de dicha cantidad proviene de compras desde la misma app porque los usuarios gastan mucho dinero durante el juego. Así, podemos clasificar a los desarrolladores de estos programas en dos categorías: éticos y no éticos. Estos últimos establecen unas reglas específicas para que el jugador tenga que gastar dinero con la mayor frecuencia posible. De hecho, se contratan a psicólogos para desarrollar patrones que exploten las debilidades humanas y continuar, así, con el proceso de “ordeño” sin que el usuario se percate o enfade. A continuación, os mostraré algunos síntomas que revelan un gasto excesivo en juegos “gratuitos”.

La estafa de los juegos gratuitos

1. Grupo de alto riesgo

Existen algunos grupos sociales que poseen una mayor tendencia a gastar dinero en bienes virtuales que otros. Los desarrolladores suelen confeccionar sus programas para que sea adapten a estos grupos específicos. En primer lugar, son usuarios jóvenes. El público idóneo son los niños que pueden gastar miles de euros en pociones y espadas mágicas.  Sin embargo, esto supone un gran riesgo porque los padres podrían tomar acciones legales contra los desarrolladores del software. Por este motivo, los juegos se dirigen a usuarios en edad legal pero menores de 25 años. El desarrollo cerebral aún no se ha completado y los jóvenes no tienen la capacidad de tomar decisiones complicadas y totalmente racionales. A propósito, les suelen gustar las animaciones, retazos de la mentalidad infantil.

Entre los principales clientes, el 66% son hombres menores de 30 años. Suelen jugar tanto en plataformas móviles como con videoconsolas, estando conectados una media de 11 horas a la semana.

 2. El orgullo de los jugadores

La publicidad suele prometer al usuario que conseguirá grandes logros delante de sus amigos o que encontrará nuevos compañeros de juego. En realidad, la finalidad de los desarrolladores es totalmente diferente: mostrar los resultados del resto de contrincantes que son mejores que los del usuario.  Así, se aprovechan del “orgullo” de los jugadores para que estos paguen, felizmente, 5 euros por subir de nivel.

 3. El juego se basa en el dinero virtual

Uno de los principales trucos es el “dinero de juguete”. Inconscientemente, es más fácil gastar las monedas virtuales que el dinero real. Si te ofrecen 5 vidas extras por dos euros, probablemente prefiramos comprarnos un café con esa cantidad. Pero la historia cambia completamente si esas mismas cinco vidas valen 16 “cristales rosas”, que compraste hace unos días al ver la súper oferta “25 cristales en vez de 20 por solo 3 euros”. Cuanto mayor sea la cadena entre el dinero y el gasto, más efectivo es el truco. Para conseguir esto, los desarrolladores crean objetos que se combinan con otros. Es decir, puedes construir un anillo usando 10 cristales de colores, luego podrás construir un collar con tres anillos y, posteriormente, se necesitará comprar un cristal especial para crear el gran collar. Cada una de estas piezas cuesta dinero. Una vez hemos llegado al punto de obtener el gran collar, si calculamos el dinero invertido, podremos haber gastado más de 50  euros.

 4. Jugamos durante un largo tiempo y, luego, no podemos avanzar en el juego

Normalmente, los juegos gratuitos suelen ser más complejos cuando se sube de nivel. Por supuesto, las últimas etapas siempre son más difíciles que las primeras. No obstante, un juego que fuese justo, estaría diseñado para que el usuario fuese aumentando sus habilidades durante las diferentes fases hasta completar el juego sin un esfuerzo extremo. En este caso, el 70-90% de los jugadores pueden llegar hasta el final según el tiempo que inviertan. Por el contrario, aquellos juegos diseñados para el lucro, están programados para aumentar drásticamente la complejidad y solo un porcentaje mínimo es capaz de ganar sin haber invertido un céntimo.

 5. Chantaje

¿Cómo funcionan los trucos psicológicos? Jugamos gratuitamente durante un largo tiempo, desarrollamos nuestro carácter, aumentamos nuestras habilidades, ganamos premios (por ejemplo, munición, un castillo…) y de repente todo se va al garete. Perdemos una batalla y todas nuestras posesiones desaparecen. Entonces, se muesetra la opción de pago para volver a pasar la pantalla y convertirnos en los héroes del combate. Este mecanismo es una clara extorsión porque hace que el usuario pague para evitar perder más tiempo en el juego.

Lamentablemente, los dos últimos signos no aparecen hasta las últimas fases del juego. Por este motivo, os recomiendo que evitéis cualquier juego que muestre cualquiera de los tres primeros síntomas o que tenga un comportamiento muy agresivo. Existen miles de juegos realmente entretenidos y divertidos que son éticos y no intentan estafar a sus víctimas.

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