¿Las redes sociales se están convirtiendo en una carga? Cuando las redes afectan tus nervios, te desconcentran y te distraen de las tareas importantes, ha llegado el momento de una desintoxicación digital. Te contamos cómo hacerlo en unos pocos pasos.
Paso 1. Reduce tu feed
Deja de seguir cuentas que no contribuyan a tu experiencia: un excompañero de clase con una obsesión reciente con el crossfit, un grupo de un antiguo hobby que ahora solo publica anuncios o cualquier otra cosa que ya no sea de tu interés. Si el contenido no te reporta ningún beneficio, lo mejor es dejar de incluirlo en tu feed.
Si prefieres no dejar de seguir o estar suscrito a una cuenta, puedes silenciarla. Las redes sociales te permiten ocultar las actualizaciones de las cuentas sin anular tu suscripción. De forma que tus amigos ni quisiera sabrán que los has silenciado.
Paso 2. Centraliza las comunicaciones
Las redes sociales son mucho más que solo feeds; también son lugares para mantener el contacto con los amigos, familiares y compañeros. Pero si hablas con personas en media docena de plataformas, es probable que acabes desperdiciando mucho tiempo revisando los buzones de entrada, incluso aunque nadie te haya escrito. Intenta determinar con tus amigos un lugar donde contactar y centraliza tu correspondencia en una o dos plataformas. De esta forma, podrás comprobar las otras con mucho menos frecuencia sin miedo a perderte algún mensaje importante.
Paso 3. Despeja tu pantalla
¿Alguna vez has cogido tu teléfono con la única intención de comprobar el clima y después has visto el icono de Facebook, lo has abierto solo un segundo y has terminado desperdiciando dos horas en un pozo sin fondo? Para evitar que esto suceda, puedes desplazar tus iconos de las redes sociales a donde no los veas. Por ejemplo, ocúltalos en una carpeta o envíalos al final de tu tercera o cuarta página de aplicaciones; ojos que no ven, corazón que no siente.
Paso 4. Configura las notificaciones
No importa lo responsable que seas a la hora de evitar tu feed e incluso mantener los iconos fuera de la vista, si una red social envía una notificación sobre una publicación nueva, podrás fácilmente y sin pensar, tocar la ventanita y encontrarte otra vez en medio de la acción. Si necesitas ayuda para concentrarte en lo realmente importante, intenta desactivar las notificaciones innecesarias. Para ello, revisa nuestras instrucciones para iOS, macOS, Windows y Android.
Paso 5. Configura el Tiempo en pantalla o el Bienestar digital
Ver exactamente cuántas horas al día pasas en las redes sociales y aplicaciones de mensajería puede darte una nueva perspectiva. Es fácil encontrar aplicaciones que ayudan con el autocontrol, pero no necesitas descargar nada para visualizar tus hábitos digitales: Abre los ajustes de tu smartphone y habilita el Tiempo en pantalla (iOS) o Bienestar digital (en Android). Coloca el widget con las estadísticas en donde siempre puedas verlo.
Y si ver las estadísticas no es suficiente, configura la aplicación para que te permita abrir la red social solo en ciertos momentos o por tiempo limitado.
Paso 6. Tómate un descanso
Cuando inicias una nueva actividad, lo más importante (y más difícil) es establecer hábitos nuevos. Intenta pasar un par de semanas evitando esas aplicaciones en las que pasas más tiempo; cuando trates de entrar a alguna por costumbre, imagínate que estás de viaje en un sitio sin conexión a Internet.
O, mejor aún, aléjate de Internet por completo si puedes. Corta el flujo de información para que puedas empezar desde cero sin sentir que te estás perdiendo algo.
Paso 7. Borra la aplicación o tu perfil
Este paso es opcional. Las sugerencias anteriores pueden ayudarte a alcanzar la libertad digital que estás buscando, pero si no, considera la medida drástica de eliminar la aplicación de tu teléfono o incluso eliminar tu cuenta. No te preocupes, no tienes por qué perder tus publicaciones, mensajes o fotos. Casi cualquier red social te permite mantener todos tus datos, incluso aunque desactives tu perfil. Ya hemos publicado en otras ocasiones instrucciones sobre cómo hacerlo en Facebook, Instagram, Snapchat y Twitter.
Paso 8. Cuídate
Cuando te hayas liberado de la sobrecarga de las redes sociales, tómate tu tiempo para felicitarte, pero no dejes de cuidarte. Es muy posible que tu cerebro intente regresar a los viejos hábitos. Si en un par de meses te das cuenta de que estás conectado a las 3 de la mañana debatiendo en los comentarios de la publicación de un desconocido, repite estos sencillos pasos.