Ten cuidado con los ordenadores públicos de los hoteles

Puede resultar tentador comprobar tu cuenta de correo electrónico, los datos de tu tarjeta de crédito o tu cuenta bancaria mientras estás de vacaciones. Pero solo hay una cosa más peligrosa que usar una red WiFi pública durante tus vacaciones: usar los ordenadores públicos del hotel en el que te alojas.

A principios de julio, un grupo de hackers fue detenido por instalar, presuntamente, keyloggers en los ordenadores de un importante hotel de Texas, Estados Unidos. El ataque provocó que el Servicio Secreto y la división de Ciberseguridad del Departamento de Seguridad Nacional estadounidense tomaran cartas en el asunto y advirtieran a todos los hoteles del país sobre los peligros de estos ataques y cómo mejorar sus medidas de seguridad. Los programas de keyloggers, registraban las claves introducidas por los usuarios y después, las enviaban por email a las cuentas de los hackers. De esta manera, los delincuentes obtenían el acceso a las cuentas personales y bancarias de los usuarios.

¿Necesitas comprobar tus e-mails durante las vacaciones? ¡No lo hagas desde los ordenadores del hotel!

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Este tipo de fraude informático es muy fácil de llevar a cabo y los turistas deben extremar las precauciones a la hora de utilizar los ordenadores públicos de los hoteles. ¿Quieres usar uno de estos ordenadores para ver el resultado del partido de tu equipo? Hazlo. ¿Quieres revisar tus e-mails o tu cuenta bancaria? Mejor usa tu teléfono o espera hasta volver a casa.

Si embargo, si es imprescindible que accedas a tu cuenta de e-mail y la única forma que tienes de hacerlo es a través de un ordenador público, se precavido, no des por hecho que el ordenador no ha sido comprometido. Establece una cuenta de correo electrónico desechable asociándola con tu cuenta de correo electrónico . Las cuentas desechables (como Mailinotor o Trashmail) tienen una vida corta y se ejecutan en un corto periodo de tiempo; pueden recibir y enviar correos electrónicos. Si es imprescindible que descargues un archivo, haz que éste sea compartible a través de un enlace y envía ese enlace a las cuentas desechables que has creado. La clave está en que nunca accedas con tus datos personales a cuentas de email, financieras, etc., a través de un ordenador público, ya que si lo haces, éstas podrían ser comprometidas.

Quizá éstas no sean las mejores opciones, pero son preferibles a tener que resetear todas las contraseñas de todas tus cuentas o, peor aún, que te conviertas en la víctima de un robo de identidad.

Aprende cómo usar un ordenador público, pero solo si es absolutamente necesario

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