Si eres un usuario cuidadoso, probablemente hayas leído detalladamente el Acuerdo de Licencia de tu producto de seguridad antes de instalarlo en el ordenador. No obstante, hoy queremos recordaros otro documento importante pero que, muy a menudo, se ignora: los Requisitos del Sistema.
Cuando no tenemos en cuenta ciertos apartados del Acuerdo de Licencia, es posible que se produzcan algunos errores de activación o tengamos problemas con el modo en que trabaja la licencia. No obstante, estas incidencias son más fáciles de diagnosticar que aquéllas relacionadas con la violación de los Requisitos del Sistema. En primer lugar, si nuestro hardware o sistema operativo (sin olvidar las aplicaciones de terceros de nuestro equipo) no son compatibles con el producto de Kaspersky Lab, entonces, recibiremos constantemente mensajes de error o no seremos capaces de instalar el software.
A veces, recibimos la siguiente respuesta por parte de nuestros clientes: “He pagado un dinero para este producto, esperando que funcionara correctamente, sin importar el equipo que tengo”. Entendemos la frustración del usuario cuando se da cuenta de que su antivirus no funciona. Pero, al mismo tiempo, debemos ser conscientes de que todos los productos tienen sus propias restricciones; por ejemplo, nunca calentaríamos una lata metálica de sopa en el microondas. En la mayoría de los casos, los fabricantes indican de forma clara y precisa, las condiciones del objeto para su funcionamiento correcto. Además, estas especificaciones sirven a las compañías como descargos de responsabilidades y ayudan a los consumidores a comprar el artículo que mejor se adapta a sus necesidades. Esto mismo sucede con los antivirus. Para ahorrarnos dinero y tiempo, debemos leer los requisitos del sistema antes de comprar el software; en Kaspersky Lab nunca los mantenemos en secreto.
¿Cómo podemos saber cuáles son los requisitos para cada antivirus? Por supuesto, la forma más sencilla es comprobarlo en la página de soporte técnico de Kaspersky Lab. Aquí podremos encontrar los requisitos del sistema de cada producto con la información más actualizada. Otra opción es ir a un establecimiento comercial y antes de comprar el software, leer en la caja los datos relacionados con la compatibilidad del antivirus.
Después de esta introducción, hablemos de los rasgos más importantes al respecto. Como ejemplo, utilizaremos la versión actual de Kaspersky Internet Security: http://support.kaspersky.com/sp/8657
Los requisitos que hemos resaltado, si no se cumplen, provocan el mayor número de incidencias. Pero vayamos paso por paso… comenzando con los sistemas operativos.
La regla principal aquí (espero que los usuarios avanzados se den cuenta) es que nuestros productos solo pueden instalarse con las versiones oficiales de los sistemas operativos, no son válidos para las versiones beta. Es realmente tentador ser uno de los primeros usuarios en utilizar la versión nueva de Windows para poder experimentar con ella. No obstante, no nos será posible instalar antivirus de Kaspersky Lab alguno. Los proveedores de software necesitan tiempo para adaptar sus productos a un nuevo sistema operativo (incluso a una actualización). Por este motivo, es necesario verificar la lista de sistemas compatibles con la solución de seguridad para estar protegido a la perfección.
Además, también os recomendamos que os aseguréis de que el producto que vais a comprar es compatible con vuestra plataforma. No todas nuestras licencias funcionan con todas las plataformas. Una licencia de Windows no puede instalarse en un equipo Mac o en un dispositivo Android.
Sumado a todo esto, también influye el número del Service Pack. ¿Qué es esto? Una serie de actualizaciones que incluyen soluciones para un número de errores críticos. Los Service Packs están disponibles en la página oficial de Microsoft, así que esta incompatibilidad no es realmente un obstáculo. Por ejemplo, un caso común es el de Windows XP SP2, donde es necesario instalar SP3 para resolver cualquier problema.
En lo referente a la “disponibilidad RAM”, la palabra “disponiblidad” es muy importante. No se refiere al RAM total del equipo, sino al volumen de memoria disponible cuando el sistema operativo está funcionando y se abren las aplicaciones necesarias. Si tu ordenador funciona con Windows 7 y solo tiene 2 GB de RAM; entonces, solo dispondremos de la mitad de la memoria cuando el sistema arranque. Si abrimos un par de aplicaciones (véase Adobe Photoshop o algún componente de Microsoft Office), el sistema se quedará sin memoria y aparecerá la temida “pantalla azul de la muerte”. Es poco probable que, con esas condiciones, el antivirus sea capaz de ofrecer una protección correcta. En este caso, os recomendamos aumentar la memoria RAM.
480 MB en el disco duro son solo suficientes para una instalación correcta, pero el sistema nos informará constantemente de que el espacio del disco es insuficiente. Por este motivo, es imprescindible disponer de 10 GB extras para asegurarnos de que podemos trabajar con nuestro equipo sin problema alguno.
Otro tema que levanta bastantes polémicas en distintos foros es la necesidad de una conexión a Internet para el funcionamiento normal de los productos de Kaspersky Lab. Nuestras aplicaciones, de hecho, no se pueden activar sin acceso a la Red; tampoco es posible actualizarlas ni reforzarlas con la protección en la nube si los servidores no están disponibles. Este requisito del sistema se introdujo, por primera vez, en Kaspersky Anti-Virus 6.0 hace varios años y no supuso un gran problema para la mayoría de los usuarios. No obstante, es imposible bloquear o cancelar dicho requisito.
A comienzos de este año, se implementó la interfaz de nuestras aplicaciones con la ayuda de la tecnología .NET Framework. Aunque tu sistema no disponga de ella, nuestro instalador la incluye. Así, en caso de cualquier incidencia, se te notificará al respecto y te ofreceremos la posibilidad de instalar este componente manualmente.
Por último, os queremos hablar sobre otro tema candente: algunas versiones de navegadores realmente populares también son incompatibles con nuestros productos. Éste es el motivo por el cual la herramienta Anti-Banner a veces no funciona. Si esto sucede, nos ponemos mano a la obra inmediatamente para lanzar un parche lo antes posible. La lista de navegadores compatibles está creciendo constantemente y se actualiza regularmente.
¿Cuáles son las conclusiones principales? Siempre merece la pena leer los requisitos del sistema antes de comprar una solución de seguridad. Ellos son, probablemente, el secreto principal para que un antivirus funcione perfectamente. ¡Gracias por confiar en nuestros productos!