El mundo actual está tan conectado a los servicios online que cuando tenemos un invitado, el típico “Hola, ¿qué tal?” viene acompañado de “¿Cuál es la contraseña de tu wifi?”. Pero el anfitrión no cae en la cuenta de que si revela esta información puede poner en riesgo la seguridad de su red.
Por ejemplo, los invitados pueden descargar accidentalmente un programa malicioso o conectar un teléfono o portátil que ya esté infectado a tu red. Muchos malware son capaces de expandirse ellos mismos por la red local y, si un dispositivo infectado se conecta a tu wifi, intentará contaminar todo lo que encuentre a su alcance.
¿Por qué deberías configurar una red wifi para invitados?
Con una red wifi para invitados podrás ser hospitalario sin renunciar a la seguridad. Se trata básicamente de un punto de acceso aislado a tu router. Todos tus dispositivos domésticos están conectados a un punto y se unen formando una red, pero la red de invitados es un punto diferente que proporciona acceso a Internet, pero no a tu red doméstica. Como el mismo nombre sugiere, es para que los invitados obtengan conexión.
Con una red de invitados, todos ganan. Tus familiares y conocidos no pierden el contacto con el mundo exterior y tus datos no se ven comprometidos. El malware que pueda haber acabado en el smartphone de uno de tus invitados, no podrá acceder a la carpeta con las fotos de tu familia o a otros documentos importantes.
Cómo configurar una red wifi para invitados
Configurar una red de invitados aislada es más fácil de lo que parece. Para empezar, no hace falta extraer otro cable ni recurrir a tu proveedor de servicios de Internet. Lo más probable es que en tu router encuentres la opción de habilitar una red adicional para invitados, solo tendrás que acudir a ajustes y activarla. Para ello, introduce la dirección IP de tu router en la barra de URL del navegador (normalmente es 192.168.1.1 o 192.168.0.1, pero no siempre). Esa dirección debe aparecer en el manual de usuario del dispositivo.
En el cuadro de diálogo que aparece, introduce el nombre de usuario de administrador y la contraseña. Si nunca las has cambiado, seguramente las encuentres en el contrato de tu proveedor de servicios o en el manual. Aunque, para incrementar la seguridad, te recomendamos que las cambies y para no olvidarlas, utiliza un gestor de contraseñas.
En los ajustes del router, busca Autorizar el acceso a invitados o Red de invitados. Si no lo encuentras, comprueba la guía de nuevo o busca en Google, con el nombre del modelo de tu dispositivo. Si es un modelo muy básico o está desfasado, es posible que la opción no aparezca en los ajustes, pero la mayoría de los routers actuales la tienen.
Después de seleccionar la casilla de verificación pertinente, añade el nombre de la red de invitados (llamada SSID en el panel de control de algunos routers), este es el nombre que verán tus amigos en la lista de redes disponibles.
En algunos de estos dispositivos, el acceso wifi para invitados empezará a hacer efecto de inmediato, aunque puede que algunas necesiten modificaciones. Pero, en cualquier caso, incluso si la red de invitados ya está activa, recomendamos que te asegures de que está correctamente configurada:
- Establece una contraseña para la nueva red. Normalmente, se puede hacer ahí mismo, debajo del nombre de la red. De esta forma, solo aquellos que conozcan la contraseña podrán acceder a tu conexión de invitados.
- Establece el tipo de cifrado para que nadie pueda interceptar la información transmitida a través del wifi. Entre las opciones disponibles, selecciona WPA2 (WPA2-PSK o WPA2-Personal en algunos ajustes), un algoritmo de confianza que admiten todos los dispositivos inalámbricos actuales.
- Asegúrate de que la casilla Autorizar a los invitados a acceder a los recursos de la red local esté desactivada. Puede que no aparezca ese ajuste, pero si está, desactívala para que los invitados no puedan acceder a tus archivos u otra información almacenada en tus ordenadores, que es básicamente el objetivo de una red de invitados. En algunos routers aparece de forma opuesta, con la casilla Aislar, que aísla la red de invitados de su red local.
- Desactiva Autorizar el acceso a ajustes (o similar), si existe esa función. Si está activa permitirá que los usuarios de la red de invitados accedan a los ajustes del router y vuelvan a configurarlos, incluidos sus propios permisos de acceso.
¡Y listo! Ya está configurada tu red wifi para invitados que te proporciona acceso seguro a Internet y protege tus dispositivos locales.
¿Por qué es mejor conectar dispositivos del IdC a una red para invitados?
Una red wifi para invitados es una buena idea no solo si tienes muchos amigos, sino también si tienes dispositivos inteligentes domésticos. Televisores y teteras inteligentes, videoconsolas y similar también necesitan conexión a Internet. Pero suelen ser mucho más vulnerables que los ordenadores con las últimas actualizaciones instaladas. Es decir, si sufren un ataque mientras están conectados a tu red principal, los intrusos podrán acceder a tus otros dispositivos.
Con respecto a los dispositivos inteligentes, muchos expertos afirman que el hackeo no es una posibilidad, sino una realidad. Mientras que es posible sostener que una bombilla inteligente forme parte de un botnet, este no es el caso de un ordenador que se transforma en zombi. Entre otras cosas, los botnets se utilizan para expandir malware y si tu ordenador se ha convertido en un zombi, este código malicioso contará con un pase libre a su memoria.
Si conectas todos los dispositivos IdC a una red para invitados correctamente configurada en lugar de a la red principal, conseguirás protección adicional contra estos ataques. De hecho, aunque los ciberdelincuentes hackeen uno de los dispositivos IdC, no podrán penetrar a tu red principal ni comprometer los ordenadores y smartphones conectados a ella.
Evidentemente, una lavadora inteligente conectada a la red para invitados podría formar parte de un botnet y de ataques DDoS o minería de criptomonedas (este es uno de los riesgos de comprar cosas inteligentes). Pero en ese caso, tu ordenador estará a salvo, junto con todos los datos bancarios e información sensible que almacena.
Y, por último, los routers son un objetivo típico de los creadores de botnets, por lo que no te olvides de actualizar el firmware de tu router periódicamente. Las últimas versiones normalmente parchean vulnerabilidades hackeables.