Hace tiempo que gran parte de nuestra vida financiera ha pasado del mundo físico al digital. Las aplicaciones bancarias, los monederos digitales, los pagos en línea y las criptomonedas son innovaciones del siglo XXI que hacen que las transacciones financieras sean más rápidas y accesibles que nunca, lo que ofrece todo tipo de oportunidades hasta ahora inimaginables.
Pero esta conveniencia tiene una desventaja: nuestras finanzas digitales son vulnerables a los delitos digitales. Por otra parte, esta afirmación solo es cierta si descuidas la protección de tus finanzas online frente a los ciberdelincuentes. En esta publicación analizamos cómo las tecnologías y los productos de Kaspersky aseguran tu dinero digital y, por lo tanto, tu bienestar financiero.
1. Administrador de contraseñas
El eje principal de toda la seguridad de las cuentas ―y los servicios financieros no son una excepción― es, como no, tu contraseña. Cuanto más débil sea, mayor será la posibilidad de que pirateen tu cuenta en alguna tienda online o sistema de pago donde introduzcas los datos de la tarjeta.
Es igualmente peligroso usar la misma contraseña para distintos servicios online. Si lo haces, y hay una fuga de contraseñas en uno de ellos (algo lamentablemente muy común), tus cuentas en el resto de servicios también se verán comprometidas. Los piratas informáticos son muy conscientes de que mucha gente usa las mismas combinaciones de caracteres en varios sitios, por lo que a menudo usan contraseñas filtradas para intentar iniciar sesión en otros recursos, una técnica conocida como relleno de credenciales. Y, naturalmente, tienden a centrarse en los servicios relacionados con el dinero.
Utilizar Kaspersky Password Manager mejora radicalmente la seguridad de las contraseñas y protege tus cuentas financieras. Nuestra aplicación genera contraseñas únicas y de máxima seguridad para cada servicio que usas, las almacena de forma segura para que no sea necesario recordarlas e incluso te avisa si se producen filtraciones. Por cierto, la última actualización de Kaspersky Password Manager incluye la posibilidad de generar códigos de un solo uso para la autenticación de dos factores. Puedes obtenerlo gratis con las suscripciones a Kaspersky Plus y Kaspersky Premium.
2. Pago seguro
Pago seguro se diseñó específicamente para ofrecer seguridad en las transacciones financieras y compras en Internet. Para proteger los datos de pago importantes introducidos en los sitios web de los bancos, sistemas de pago y tiendas online, incluidos los números de las tarjetas bancarias y las contraseñas, nuestra solución te solicita que abras esos sitios en nuestro Navegador Protegido.
En este modo especial, tus datos confidenciales están protegidos al máximo. Y si un sitio parece sospechoso de alguna manera, el Navegador Protegido te advierte con una notificación y cambiando el color del marco de verde seguro a amarillo.
Con Pago seguro, puedes comprar en Internet y hacer operaciones bancarias de forma segura sabiendo que tanto tu dinero como tus datos personales están completamente protegidos. Esta función está incluida en todas nuestras suscripciones de pago: Kaspersky Standard, Kaspersky Plus yKaspersky Premium.
3. Antivirus de archivos
Por supuesto, uno de los componentes centrales de nuestra protección financiera multicapa es el clásico Anti-Virus. Esto es lo que protege tu dinero de la amenaza más peligrosa: el malware, en particular, de los llamados stealers, que, una vez que infectan el dispositivo de destino, buscan contraseñas y claves privadas de los monederos de criptomonedas almacenados en él y las envían directamente a los ciberdelincuentes.
Otra amenaza común directamente relacionada con las finanzas contra la que protege el antivirus de archivos son los troyanos bancarios. Se trata de virus que superponen la interfaz de una aplicación bancaria con la suya propia y no solo roban contraseñas, sino que también interceptan los códigos de confirmación de un solo uso. Además, sustituyen los detalles y las cantidades de las transferencias y pagos, lo que permite a los ciberdelincuentes desviar el dinero a otras cuentas.
Estas dos amenazas por sí solas son motivo suficiente para que instales una protección fiable en todos los dispositivos que uses para realizar transacciones financieras. Hay muchos otros peligros contra los que también protege el antivirus, como los troyanos ransomware y el spyware, por nombrar sólo un par.
4. Navegación segura
Ten en cuenta que es posible que no sea tu ordenador ni tu smartphone el que esté infectado con malware, sino el servidor con el que interactúes. La primera amenaza de la que hay que preocuparse en este escenario serían los skimmers en línea, un malware que los estafadores instalan en las tiendas online pirateadas para recopilar los datos de las tarjetas bancarias de los clientes.
Los skimmers web se han vuelto muy populares entre los ciberdelincuentes: cada año, decenas de miles de tiendas online se infectan con malware de este tipo. A menudo, los propietarios de las tiendas comprometidas no son conscientes de la infección o no toman ninguna medida para neutralizar la amenaza, por lo que un skimmer web puede permanecer activo en un sitio infectado durante meses. En términos prácticos, esto significa que incluso si prestas mucho cuidado y tus dispositivos están todos limpios, aún puedes ser víctima de ciberdelincuentes simplemente si interactúas con un sitio web infectado.
Afortunadamente, también tenemos una solución para protegerte de los skimmers web y otras amenazas: la navegación segura analiza las páginas cargadas en tu navegador en busca de código malicioso y, en caso de detectarlo, te avisará de que el sitio no es seguro.
5. Antiphishing y prevención de fraudes
No hay forma de que podamos evitar los sitios web falsos y fraudulentos, y es algo que afecta a una gran cantidad de usuarios de Internet cada año. Estos pueden ser sitios clonados que imitan a los de los bancos, los sistemas de pago, las plataformas de intercambio de criptomonedas u otros servicios financieros que engañan a los visitantes para sacarles sus credenciales y después secuestrar sus cuentas.
También puede tratarse de estafas digitales que prometen grandes pagos a cambio de una pequeña comisión, tiendas online falsas con precios tentadores que nunca envían el producto comprado u otros tipos de fraude en Internet.
El problema es que los sitios de este tipo no suelen contener directamente ningún código malicioso. Para ofrecerte una protección contra esas amenazas, nuestros expertos trabajan día y noche para mantener actualizada nuestra base de datos de phishing y de sitios fraudulentos. Como resultado, nuestras soluciones te avisan a tiempo cuando el peligro acecha.