¿Una oleada de spam satura tu buzón de entrada? ¿Demasiadas solicitudes de amigos y desconocidos que comentan en tus publicaciones de Facebook? ¿Anuncios relacionados con tus búsquedas que te persiguen por Internet? El núcleo del problema es que estás regalando demasiados datos privados. Pero no te preocupes, te ayudamos: aquí te dejamos con cinco pasos para mejorar el estado de tu privacidad online.
1. Piénsatelo antes de compartir
No estás violando tu propia privacidad o espiándote, pero tu privacidad online comienza por ti mismo y tus decisiones. Vale la pena compartir cierta información, pero otra es mejor mantenerla en secreto.
No publicarías tu contraseña en Facebook, ¿verdad? Por esa misma razón, debes evitar publicar otra información que resulte demasiado reveladora, como tu dirección, tu número de teléfono personal, tu correo electrónico, etc. Antes de compartir algo, considera las consecuencias no deseadas y no compartas nada que pueda comprometer tu privacidad o la de otra persona.
Hay muchas cosas que no deberías compartir por Internet, ya que no son del todo seguras, como los billetes de avión, cualquier cosa que incluya un código QR, etc. Por ejemplo, si compartes una entrada de un concierto con un código QR, básicamente la estás regalando.
Si realmente deseas publicar la imagen de una entrada o un billete online, edita la imagen para eliminar el código QR (y el número de la entrada, tal vez) y hazlo de la forma correcta, para que otras personas no puedan restaurar la información que has intentado ocultar. Por supuesto, lo más seguro es no compartir este tipo de imágenes.
2. Navega en la red de forma privada
Cuando visitas un sitio web, se activa un código de análisis que hace un recuento de los visitantes y de la popularidad de la página. Por lo general, este código de análisis en realidad pertenece a un gigante de Internet como Google o Facebook, que utiliza esta información sobre los sitios que visitas para ofrecerte anuncios basados en tus intereses.
Una solución a esta molestia es usar el modo privado de navegación o de incógnito de tu navegador. Sin embargo, esta estrategia tiene ciertos límites. La navegación privada impide compartir cierta información con los sitios web que visitas y con muchos terceros que ni siquiera conoces, pero no toda.
Por ello, una mejor forma es instalar una solución que evite el seguimiento: por ejemplo, Navegación Privada en Kaspersky Security Cloud.
Sin embargo, ni este tipo de funciones ni el modo de incógnito pueden ocultar tus actividades online de tu proveedor de servicios de Internet (ISP, por sus siglas en inglés). Muchos ISP recopilan esa información y la venden. Algunos de ellos van aún más lejos y te ofrecen anuncios con sus propios sistemas de publicidad. Si quieres ocultarles tus movimientos online, usa una VPN. El uso de una red privada virtual establece un túnel cifrado y seguro entre tu ordenador y un servidor remoto, y todo lo que tu proveedor podrá ver es que te estás comunicando con ese servidor.
Por supuesto, te recomendamos nuestra VPN, Kaspersky Secure Connection.
Otro aspecto que deberías tener en cuenta es el motor de búsqueda y el navegador que estás utilizando. No debería sorprenderte que algunos navegadores recopilen datos y los utilicen para la publicidad, al igual que los motores de búsqueda. ¿No te parece bien? Entonces, utiliza navegadores más orientados hacia la privacidad, como Firefox, y motores de búsqueda que no rastreen a los usuarios, como DuckDuckGo y Startpage.com.
Si lo haces, deberás saber que estarás llevando a cabo ciertos sacrificios a cambio de privacidad. Por ejemplo, los resultados de la búsqueda en motores orientados a la privacidad tienden a ser menos relevantes; ya que no saben lo suficiente sobre ti como para ajustar los resultados según tus necesidades.
En cuanto a los navegadores orientados a la privacidad, la desventaja es la optimización del sitio web. El estándar más utilizado para el diseño web actual es el navegador de Google, Chrome. Por tanto, no todos los sitios web están completamente optimizados para Firefox, que es más privado.
3. Configura tus redes sociales para una mejor privacidad
Las redes sociales son lugares públicos, pero no todos los espacios públicos son iguales, y algunas cosas no deberían mostrarse a todos. Las redes sociales ofrecen una gran cantidad de ajustes para determinar qué información está disponible para qué tipo de usuarios (no registrados, registrados, amigos de amigos, amigos, etc.).
Además, en la mayoría de los casos, las redes sociales te ofrecen muchas otras opciones. Puedes elegir si tu perfil se puede buscar y si otras personas pueden etiquetarte, escribirte mensajes o molestarte. Dedica un tiempo a configurar tu privacidad en cualquier red social que utilices, te explicamos cómo hacerlo en Facebook, Twitter, Instagram y muchos otros servicios; de esta forma, evitarás que te molesten el spam o las estafas (tan abundantes en todas las redes sociales).
Para una inmersión más profunda en la privacidad online de las redes sociales, te recomendamos que uses nuestro Privacy Checker, una herramienta simple que describe todos y cada uno de los ajustes de una una red social y te ofrece consejos sobre cómo configurarla para diferentes niveles de privacidad en las diferentes plataformas. Como habrás notado, mejorar la privacidad a veces significa sacrificar la comodidad, y esta decisión es personal.
Privacy Checker no se limita a las redes sociales; también puede ayudarte a configurar tu sistema operativo para una mejor privacidad.
4. Elimina cuentas y datos o elimina tus cuentas, pero conservando los datos
Todos tenemos docenas de cuentas, muchas de las cuales apenas usamos u olvidamos hace mucho tiempo, pero solo algunas de ellas se eliminan automáticamente. La mayoría persisten y cualquiera podría filtrar tu información algún día. Como todos sabemos, las brechas ocurren con mayor frecuencia de lo que nos gustaría.
Una buena práctica es eliminar cuentas que no usas y que no piensas usar en el futuro. No dudes en hacerlo. Esto es especialmente importante para las cuentas que contienen muchos de tus datos, como los perfiles de redes sociales, las cuentas de correo electrónico no utilizadas y las cuentas con sistemas de pago.
Si has leído suficientes artículos sobre privacidad como para considerar dejar al menos algunas redes sociales para siempre, no olvides que puedes hacerlo sin perder tus datos. Aquí te explicamos cómo hacerlo en Instagram, Twitter, Snapchat y Facebook.
5. Usa el RGPD, que se ha creado para ti
La privacidad alcanzó un nuevo nivel con el Reglamento General de Protección de Datos de la Unión Europea. Ahora puedes solicitar un recuento de los datos que una empresa tiene sobre ti. Las empresas están obligadas por ley a responder e, incluso, a eliminar esta información bajo petición.
El problema con el RGPD es que muchas personas no saben cómo usarlo. De acuerdo con nuestra encuesta, cuatro de cada cinco personas (el 82 %) han intentado eliminar algo de Internet, pero menos de la mitad (el 37 %) ha sabido cómo hacerlo: cómo escribir una solicitud sobre el RGPD, a quién enviarla, qué preguntas realizar y cómo formular las solicitudes. Como la mayoría de los asuntos legales, el RGPD no es sencillo.
Y aquí es donde nuestro nuevo servicio, Undatify de Kaspersky, resulta útil, ya que automatiza parcialmente tus solicitudes de eliminación de datos. Te ayuda a enviar solicitudes de eliminación de datos a las empresas que ya no deseas que almacenen o procesen tus datos. También ayuda a aclarar las respuestas de las empresas y presentará una queja por ti si estas no responden. Undatify solo está disponible en las regiones en las que se aplica el RGPD.