No compartas vídeos públicos con tus hijos o prepárate para consecuencias virales

El mundo es un reality show y a veces no podemos resistirnos a la oportunidad de alcanzar nuestro momento de fama. No usemos a los niños para nuestra propia promoción.

El mundo es un reality show y a veces no podemos resistirnos a la oportunidad de alcanzar nuestro momento de fama. Publicamos fotos graciosas de nosotros mismos para entretener a nuestros amigos y seguidores, y frecuentemente publicamos fotos y vídeos de nuestros niños por la misma razón.

No aplicamos ninguna configuración de seguridad, ya que no queremos privacidad – básicamente queremos que todos se derritan viendo a nuestros pequeños. Desafortunadamente, no funciona de esta manera. En el futuro los niños probablemente dirán “Gracias, mamá y papá” por esta decisión. En algunos casos, podemos notar su descontento actual.

  1. Piensa en las consecuencias

Si subes vídeos de tus niños a YouTube, tendrás que enfrentarte a trolls tarde o temprano. Examinan la página detenidamente y dejan comentarios malos sin importar lo dulce e inocente que sean las grabaciones. Si quieres fama en Internet, prepárate para enfrentarte al lado opuesto: comentarios desagradables. Mira este vídeo. ¿Te gusta? ¿Crees que se merece todos esos comentarios tan desagradables?

Bernard Brunu: Ha dicho que se quiere masturbar jaja

Reven50: estos bebés pertenecen al basurero

The Asian Blubby: En su mente: Ey niña, te voy a violar mientras duermes eh!

ceo: Dejad de adoptar bebés koreanos. Si eres blanco adopta a un bebé blanco. Los koreanos son caros. Nadie quiere a ese bebé en Korea, pueden adoptar en el extranjero.

Y esta es solo la punta del iceberg: no hemos profundizado en buscar los comentarios más sucios. Siempre es desagradable leer cosas malas sobre tus hijos, pero si publicas vídeos online sin ningún acceso restringido, seguramente verás algunos.

En el siguiente vídeo un niño pequeño está intentando decir “banana”, pero confunde el número de sílabas “na” repetidamente. Entonces pronuncia “bana” o “banananana”. Muy bonito, ¿no? Pero a parte de todos los comentarios positivos, un número de desconocidos están llamando al niño “champiñón estúpido” por su corte de pelo. Y estos comentarios son realmente malos.

Baruck Obuma: ¿Podrías eliminar esa mierda por favor?

Cannibal potato lesbian: ¿por qué está vivo este champiñón y por qué alguien se lo quedaría como hijo?

Hannah Bluhm: ¿El champiñón tiene nombre?

Tierney Spessard: ¿No debería estar este niño en un jardín de champiñones?

BoonieGames (Boonie4Eva): Obviamente no puede decir banana, ¡es un champiñón!

¡Y finalmente la voz de la razón! HiitzJenna Roblox: Comentarios nada originales sobre su pelo por todos lados…

Finalmente otros usuarios defendieron al niño. Si ves vídeos nuevos del niño, sigue usando el mismo corte de pelo, y las gente continúa llamándolo “champiñón”, pero suelen añadirle “bonito”. En este caso los propios espectadores regularon la situación, pero en serio, podría haber finalizado de otra forma totalmente diferente.

2. Ignora a los trolls

En 2009, el padre de David, un niño de 7 años publicó un vídeo en YouTube, enseñando la graciosa reacción de su hijo de camino al dentista, y se volvió viral. El vídeo recibió un montón de comentarios positivos, aunque hubo algunos negativos también.

Como lo ha admitido el padre, él y su esposa solo se fijaron en la reacción negativa… hasta que hicieron algo muy inteligente: decidieron ignorar a los trolls. Al final la pareja transformó una situación inesperada en un evento familiar e incluso ganó dinero de los anuncios de YouTube.

De hecho la gente en Internet es inquisitoria. Al ver tus vídeos, hablarán de tu voz, qué canción has puesto de fondo y qué cosas hay en el fondo de la habitación. Seguramente compartirán sus opiniones si cualquier cosa en el vídeo les parece mal y te dirán que eres mal padre.

Además, llamarte gay varias veces no supone en absoluto ningún problema para ellos. Todo esto le sucedió a un padre que solía cantar fuzzy-wuzzy mientras jugaba con su hijo.

Aunque el padre obviamente estaba incómodo con los comentarios, hizo lo correcto: en vez de concentrarse en cada comentario, dejó una nota que reflejaba su actitud, y se olvidó de los trolls. Es esta:

Este vídeo fue publicado principalmente para mi familia que está por todo el país. No tengo idea por qué se ha vuelto tan viral. Este es mi hijo mayor, Ricky. Su primera palabra fue “Papa”. Las latas de Pepsi del fondo no son de Ricky. Sí, mamá estaba jugando a Super Paper Mario en el fondo. No, no soy gay, pero me escucho raro cuando les hablo como bebés a mis hijos. Creo que ya he cubierto toda la información pertinente. Gracias por ver el vídeo y por dejar comentarios positivos (o negativos), aunque les pido por favor que no insulten.

3. Comentarios cercanos

La mejor forma de protegerte de los trolls es desactivando los comentarios del todo. Familiares y amigos pueden compartir sus reacciones a través de un chat o en persona, a otros solo les podrá gustar (o no gustar). Parece que los propietarios de este vídeo llegaron a la misma conclusión.

A juzgar por la nota al principio del vídeo, los trolls también encontraron algo en el niño: esta vez fueron las orejas. O lo que es peor, la gente corriente suele hacer preguntas desagradables también, solo por curiosidad o “por el bien común”. Esto puede ser incluso más molesto.

4. Proporciona acceso al vídeo solo a un límite de personas

Si no quieres que el vídeo de tu hijo se convierta en un meme, deberías limitar el acceso a tus vídeos. Hay algunas opciones para elegir:

¿Conoces la diferencia entre vídeos ocultos y privados en YouTube? Son configuraciones de privacidad que se adaptan a diferentes situaciones.

Para todo el mundo y su esposa: todos tus vídeos son públicos por defecto, lo que significa que cualquiera puede verlos o encontrarlos en los resultados de búsqueda.

Una configuración no tan mala y de la que se puede perder el control: a un vídeo oculto se puede tener acceso desde un enlace directo. Esto significa que puedes enviar un enlace a tus amigos y familiares y ellos a su vez pueden ver el vídeo y compartirlo. Y aquí es cuando las cosas van mal.

El vídeo privado es la mejor opción para un padre preocupado. Los vídeos privados pueden ser vistos por ti y los usuarios de YouTube que selecciones y nadie más.

Las fotos, vídeos y publicaciones de Facebook pueden y deben ser protegidos de la misma manera. Si piensas lo mismo, asegúrate de leer nuestro post con preguntas sobre cómo fortalecer la privacidad en Facebook.

Y recuerda que puedes visitar nuestro proyecto junto a la Fundación Alia2: Familia Segura.

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