Los trabajos falsos existen desde hace siglos. Incluso el mismo Sherlock Holmes tuvo que lidiar con ellos en La Liga de los pelirrojos de Arthur Conan Doyle. Y sentimos comunicarte que los estafadores de la vida real son tan sofisticados como los personajes literarios, por lo que deberías analizar con detenimiento todas las ofertas de trabajo con las que te encuentres para evitar la pérdida de dinero.
Internet, las redes sociales, las criptomonedas y, por último, el auge del teletrabajo concede a los delincuentes las herramientas que necesitan para poner en práctica el fraude en la contratación de trabajadores. En este artículo, repasaremos la lista con las estrategias de fraude más comunes y las señales de alerta que debes tener en cuenta para evitar las estafas relacionadas con el trabajo.
Las principales estrategias de engaño
A menudo los estafadores intentan imitar a protagonistas legítimos del mercado laboral. Las ofertas pueden llegar de sitios de búsqueda de empleo (CareerBuilder, Headhunter, etc.), redes sociales (LinkedIn) o correo electrónico. Una entrevista por Zoom o Teams, tener que rellenar un formulario en el “sitio de una empresa”, un “primer día en el trabajo” en Slack o Bitrix24 y demás situaciones típicas de un trabajo honesto pueden resultar convincentes al principio. ¡A veces incluso te contratan grandes marcas! Pero antes o después necesitarán algo más que tus horas de trabajo y tu experiencia.
1. Las formaciones de pago
Si en un trabajo solicitan el uso de una aplicación o herramienta en específico, es posible que debas pagar y realizar un curso de formación obligatorio antes de comenzar y que se te envíe un enlace. Puede que incluso la “empresa” te garantice el rembolso del dinero en tu primera nómina, pero lo cierto es que vuestra relación terminará tan pronto como completes la “formación”.
Para ser más convincentes, la “plataforma de formación” puede parecer independiente y no tener ningún tipo de relación con ninguna empresa en particular, pero forma parte de la misma estrategia. Que tengas que pagar una formación con tu propio dinero ya es una bandera roja en sí misma. Una empresa honesta te advertiría sobre las habilidades y certificados necesarios para el puesto antes de la contratación y no te elegiría si no contaras con las cualificaciones demandadas.
2. Las certificaciones y su preparación
Una variación de la estrategia anterior simula ser un intermediario de contratación para un puesto de trabajo honesto y real. Si el trabajo requiere una certificación específica o una prueba de acceso obligatoria, los estafadores garantizan la contratación después de realizar sus “cursos de formación”. Pagas por la formación y puede que hasta aprendas algo, pero no recibes ningún tipo de ayuda a la hora de encontrar trabajo y, por supuesto, no hay ninguna garantía. Esta estrategia se explota principalmente en los EE. UU. para trabajos gubernamentales.
3. La asistencia en la búsqueda de empleo
Otra estrategia popular es la creación de una agencia de contratación que encuentra gente en busca de trabajo y les promete dar con la empresa ideal en un corto periodo de tiempo, a cambio de, por supuesto, una cantidad fija de dinero. A veces vuelven con un puesto muy atractivo y te piden que les pagues por cosas tan insignificantes como darte a conocer el nombre de la empresa de contratación. Ni siquiera tiene sentido profundizar en los detalles de la oferta. Las especificaciones del mercado laboral son tan amplias que siempre es la empresa la que paga por la búsqueda, no el empleado. Si el “reclutador” solicita dinero, lo más seguro es que se trate de una estafa.
4. La compra de herramientas, útiles, etc
Imagínate que te dicen que te han contratado para un puesto de trabajo, pero para poder desarrollarlo necesitas una herramienta o máquina en específico o simplemente un portátil. Tendrás que comprarlo de un sitio en concreto y el dinero te lo rembolsarán en tu primera nómina. Evidentemente, si picas el anzuelo, no recibirás ningún portátil ni rembolso.
Pero todavía puede haber una estrategia más elaborada. Recientemente en LinkedIn, un especialista de marketing contó una historia sobre cómo fue elegido para investigar el mercado de las criptomonedas tras un largo proceso de entrevistas online, reuniones virtuales con el equipo de recursos humanos y acceso a una formación, pero antes, debía comprar Bitcoin de una plataforma de intercambio en concreto. Cuando comenzó a sospechar que algo iba mal, le dijeron que se tomara un descanso y, mientras tanto, que eligiera un portátil. Después de dar con la factura del portátil y ver que se había pagado con su propio dinero, el autor finalmente se convenció de que estaba tratando con estafadores.
5. El envío de mercancía
También te pueden ofrecer un trabajo desde casa en el que recibes productos, los revisas y los devuelves por correo. A menudo hay que eliminar parte del embalaje y de los documentos que acompañan. En esta estrategia, las víctimas se utilizan como peones de otra estafa: la reventa de productos ilegales comprados ilegalmente con tarjetas de crédito robadas, por ejemplo.
A final de mes, el empleado no recibe el pago y los paquetes dejan de llegar. Por otro lado, la policía podría presentarse en tu puerta, dado que la dirección de envío es uno de los aspectos principales de la investigación de compras fraudulentas.
6. La reventa de bienes
Puede que ni siquiera te ofrezcan un trabajo, sino ¡la participación en una pequeña empresa! Tendrás que comprar productos electrónicos caros u otros artículos populares a mitad de precio y luego venderlos por el precio original. Es muy simple. Después de la primera compra (pagada por adelantado, por supuesto) o no obtienes nada o recibes una imitación barata.
7. El phishing común
A veces, el proceso de contratación simplemente se usa para obtener tus datos personales, que luego pueden usarse en otras estrategias fraudulentas. En esta ocasión, después de una entrevista, te contratan y te envían un registro laboral estándar en el que solicitan información personal detallada, incluida tu dirección, información de contacto, número de la seguridad social o VAT e información bancaria para enviarte la “nómina”. Después de enviar este formulario, no volverás a ver ni tener noticias de la “empresa”.
Cómo detectar estafas de empleo
- Las empresas honestas no piden dinero a los trabajadores
Esta es la regla fundamental y más importante. No importa cómo sea el pago (compra de equipos, formaciones, materiales de certificación, tarifa de registro o depósito de seguridad), el simple hecho de tener que invertir tu propio dinero es la señal más grande y clara de que te están “contratando” unos estafadores.
- Las empresas honestas son bastante exigentes
Si has conseguido un trabajo relativamente exigente y bien remunerado en tu primera entrevista, deberías pensarlo dos veces. Unos plazos de contratación e incorporación tan ajustados deberían hacerte sospechar. Al igual que si no solicitan la antigüedad, experiencia y calificaciones del solicitante.
- Los estafadores pueden utilizar marcas famosas
Es probable que una empresa de contratación o consultoría te esté contratando para trabajar para una empresa grande y prestigiosa, o incluso para un departamento gubernamental. Esto sucede, pero es importante que compruebes que los reclutadores realmente trabajan para la empresa y que en al menos una de las entrevistas haya empleados.
Vale la pena comprobar la reputación de la empresa y del reclutador. Para ello, puedes buscar en Internet una combinación de “nombre de la empresa de contratación” + “estafador” o “empresa” + “fraude de contratación” o “nombre de la empresa de contratación” + “reseñas”.
También puedes consultar la sección “trabaja con nosotros” en el sitio web de la marca: ¿encuentras la oferta de empleo?
- Los estafadores utilizan el phishing
Nuestros consejos habituales contra el phishing pueden ayudarte a reconocer una situación en la que un cuestionario de trabajo o el anuncio en sí se publica en un sitio fraudulento que imita el sitio oficial de una marca. No es raro que unos supuestos empleados de recursos humanos se pongan en contacto contigo desde cuentas que se asemejan a direcciones corporativas, pero que en realidad están alojadas en dominios de phishing o correo electrónico gratuito como Gmail.
Por supuesto, es difícil estar en constante alerta y comprobar enlaces y direcciones, sobre todo cuando ya estás pensando en ese “trabajo soñado”. Por ello, debes delegar la tarea de rastrear los enlaces de phishing a una herramienta especialmente diseñada para ello que te advertirá y bloqueará si intentas acceder a un enlace malicioso.
- ¿Cómo te ha encontrado la empresa?
La respuesta a esta pregunta también es importante, que contacten contigo con una oferta de trabajo atractiva e inesperada cuando ni siquiera estás buscando trabajo es en sí mismo sospechoso. Por otro lado, si realmente estás buscando trabajo y publicas tu currículum e información de contacto en páginas de búsqueda de trabajo, es posible que llamen a tu puerta tanto estafadores como empresas honestas. Estate atento.
- No proporciones información personal por adelantado
El contrato de trabajo se suele firmar el primer día de trabajo. Si te piden algún tipo de información personal por adelantado, incluidos los datos bancarios, es mejor que no los proporciones directamente.
- Consulta a alguien en quien confíes
Muestra la oferta y la correspondencia con la empresa a alguien de tu confianza que pueda percatarse de algo que tú te hayas perdido. Una segunda opinión siempre es útil, incluso aunque dudes mínimamente.
- Pide referencias de la empresa
Quizás conoces a alguien que ya trabaja para la empresa. Pregunta a tus amigos. Si no conocen al “reclutador” o si la empresa no está contratando a nadie para el puesto por el que solicitan una entrevista, debes andar con ojo.
Este último consejo resulta extremadamente importante dado que los estafadores mejoran constantemente sus técnicas. Puedes encontrar una oferta convincente en un sitio popular de búsqueda de empleo, pasar tres rondas de entrevistas y aun así tratarse de un trabajo fraudulento. Por tanto, la vigilancia, el sentido común y la comprobación a través de contactos personales es la forma más confiable de evitar sorpresas desagradables.